miércoles, 30 de marzo de 2011

Capítulo III

Se terminó el horario escolar, y los alumnos salían del centro hacia sus respectivos hogares. Nicolás se encontró con sus amigos a unos pasos de la puerta, como acostumbraban el año anterior. No sabía por qué le miraban y se reían a carcajadas según se iba aproximando, hasta que entre risa y risa escuchó "Jennifer". Entonces, su expresión se volvió seria y algo enfadada. Sus colegas se percataron y cambiaron de tema:
-Si tío, el Real Madrid no tiene nada que hacer contra el...
-¿Qué dices? Pero si el Real Madrid es el mejor equipo, tío. ¡No tienes ni puta idea!
Nicolás les alcanzó al fin tras unos cuantos pasos más, se plantó frente a ellos, y les gritó:
-¡Vosotros sí que no tenéis ni idea! - su rostro se enrojecía, y esta vez no era de timidez.
-¿Qué hablas tú?
-¿Somos idiotas? No tenéis ni idea de cómo se disimula, y de valentía tampoco. No cambiéis de tema cuando digáis "Jennifer" tan alto como para que yo lo escuche.
-Es que tío, reconócelo...
-¿Que reconozca qué?
-Que te mola. O al menos, te hace tilín. Joder, que no os conocéis y ya...
-¡¡Precisamente por eso, imbécil!! No nos conocemos, ¿cómo cojones me va a molar, estúpido?
-Eh, tronco, relájate. Tampoco es para tanto... vale, sí, hablábamos de que hacéis una pareja...
-¡No! ¡Cállate! No me importa, ¡no me importa! No me molesta lo que habléis de mí, y lo sabéis: llevamos años juntos, tíos. Lo que realmente me jode es que me toméis por estúpido pensando que no me voy a pispar, y que encima os hagáis los locos cuando os pregunto. ¿Somos amigos? ¿Se supone que somos "amigos"?
-Eh, eh, eh... tío... ¡cálmate! ¿vale?
-Vale, vale, me relajo. Pero me vuelvo solo a casa.
-¿Estás enfadado?
-Me vuelvo sólo para no soltaros un par de hostias a cada uno. Nos vemos mañana.

Nicolás se alejaba en la acera, y sus amigos no daban crédito a lo sucedido. Jamás lo habían visto así... y menos por una chica. ¿Será porque seguramente estaba empezando a gustarle de verdad?...

1 comentario: